domingo, septiembre 23, 2007

Domingo…


Hoy he bajado como todos los días a comprar el periódico y ahora estoy con el segundo coffe de la mañana leyendo las noticias uno ya se empieza a poner de mala leche, pero hay algo más grave que ha hecho que me enfurezca y se trata de el diseño de "EXISTENCIAS Guía musac 8" que venía adjunta a "La Crónica El Mundo" periódico de mi ciudad. Pero, creo que con esto haré un post por la tarde, de momento lo dejamos en pause. Y yo ahora me hago una pregunta ¿el diseñador nace o se hace? Qué hace que una persona crea que es capaz de hacerlo todo bien? da igual el campo que se proponga, no voy a decir más, lo dejaré para ese post que os he comentado antes.
Lo que si tengo claro es que aunque nazcas o te hagas hay que seguir estudiando y profundizando, unos profundizan en programas, otros en diseño, otros en tipografía, otros en fotografía, otros en todo, la cuestión es seguir dándole.


Y el blog de Iddeco nos ayuda muy mucho. En esta ocasión han comenzado con una serie de post sobre los grandes tipógrafos de ayer y hoy, para la primera entrada han empezado con Zuzana Licko, co-fundadora de la casa Emigre, casi nadie. Me encanta que estos chicos/as de Iddeco se empeñen en que no paremos de aprender cosas sobre el diseño y la comunicación. Grandes tipógrafos de ayer y hoy [I] Zuzana Licko.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Muchas gracias Mork por la reseña. Creemos que en el Diseño como en otros ámbitos, los buenos profesionales nacen y ,sobre todo, se hacen porque siguen interesándose en lo que les motiva e ilusiona, y se interesan por transmitírselo a otras personas.
Gracias de nuevo.

Isabel

AnnieChristian dijo...

Estoy de acuerdo con Isabel y aprovecho para rendir pleitesía a Iddeco y su buen hacer.

Y ya puestos, la cuestión es si la gente con "mucha cara" nace o se hace... o lo que es más grave, si la gente que abre los brazos, sin hacer un análisis, ante cualquier propuesta de los supuestos iluminados, nace o se hace.

Porque vamos, que alguien por que sea un genial cantante -por ejemplo- se considere capaz de hacer bien el diseño de un Ferrari, una joya, o un reloj me da un poco igual, pero que los encargados de "abrir las puertas" también lo piensen resulta un poco más hiriente.